El mes de enero de 2019 se caracterizó una vez más por la elevada cantidad de firmas de contratos temporales de muy corta duración. En concreto, el 29,5% de los nuevos contratos tuvieron una duración igual o inferior a los quince días, lo que representa un aumento del 1% respecto al mes de enero del 2018, en base a los datos proporcionados por el SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal).
Más concretamente, se firmaron un total de 1,6 millones de contratos temporales, lo que supone la nada despreciable cifra del 90,2% del total de los 1.858.077 contratos firmados en enero. De los 1,6 millones de contratos temporales, 548.838 tuvieron una duración inferior a los quince días y, de estos, 471.782 fueron por un periodo inferior a la semana.
La contratación temporal experimentó un considerable aumento respecto al mes de enero de 2018, incrementándose en un 6%. El colectivo en el que la contratación temporal tuvo mayor incidencia fue en el de las personas con un menor nivel de estudios. Concretamente en este grupo de trabajadores, que sólo cuentan con estudios generales secundarios, el 91% de los nuevos contratos fueron de carácter temporal. Mientras que en el colectivo de trabajadores con títulos universitarios esta cifra se situó en el 77,6%.
Por otro lado, aunque los sindicatos han denunciado numerosas veces que la elevada estacionalidad y la elevada rotación en ciertos puestos de trabajo se está cronificando en el mercado laboral español; la CEOE, las asociaciones de autónomos y las empresas de colocación han advertido por su parte que este año será peor que los anteriores en el ámbito laboral, debido a la desaceleración gradual que están experimentando la economía y el empleo.